En un momento histórico en el que la equidad y la inclusión educativa y tecnológica son más urgentes que nunca, SOF.1A, empresa mexicana con enfoque humanista y tecnológico, ha desarrollado un proyecto pionero y revolucionario.
Conscientes de que la transformación educativa no puede ni debe recaer únicamente en las instituciones gubernamentales, el equipo de SOF.1A presenta su propuesta como una herramienta complementaria, inclusiva y colaborativa, que suma esfuerzos al sistema educativo nacional mediante tecnología de realidad virtual adaptada a contextos escolares y comunitarios.
“Nuestra misión no es sustituir métodos tradicionales, sino ampliar horizontes. Queremos llevar experiencias que normalmente serían inaccesibles para muchas y muchos estudiantes, directamente hasta sus escuelas, sin que tengan que desplazarse o pagar demasiado”, explicaron los fundadores del proyecto. Buscamos ser un apoyo para el sector educativo, respetamos y admiramos la labor de los maestros de nuestro país.
Llamado a la colaboración y la acción
“Necesitamos sumar manos, recursos y voluntades. El futuro de la educación nos necesita unidos, generando soluciones accesibles, humanas y viables. Buscamos aliados que entiendan que educar es un acto colectivo”, enfatizaron los fundadores del proyecto.
SOF.1A ya ha iniciado su primera fase en algunas escuelas públicas, donde los resultados han superado las expectativas: buena participación estudiantil y entusiasmo por el aprendizaje, fortalecimiento del pensamiento crítico y conexión emocional con los contenidos.
Esta propuesta se perfila como una herramienta estratégica para alcanzar comunidades rurales, indígenas y marginadas, permitiendo que niñas, niños y adolescentes vivan experiencias de aprendizaje inmersivo sin depender de una infraestructura costosa o centralizada.
La empresa ha lanzado una convocatoria abierta a instituciones públicas y privadas, medios de comunicación, sociedad civil organizada y posibles patrocinadores, invitándoles a formar parte de un movimiento que busca hacer de México un referente en innovación educativa con justicia social.
“El progreso educativo debe construirse desde el territorio, la comunidad y la empatía. Este proyecto no es nuestro: es del país que queremos ver crecer”, concluyó la CEO del proyecto.